domingo, 28 de junio de 2009

El amor al arte

Es domingo, son las 9 de la mañana y no hace ni una hora que llegué a mi casa. Estoy madreadísimo. ¿La razón? Estuve ensayando hasta la una de la mañana una obra de teatro, fue realmente graciosa la forma en la que entré, pues yo no tenía intención alguna entrar a la obra, acompañé a una amiga a la audición y zaz! que me llevo uno de los papeles principales.

Me halagó, debo ser sincero, pues más personas iban por un papel y yo sin más salí con él, pero bueno, todo tiene un precio y debido a esto me tuve que quedar dos semanas más, en lugar de irme todas las vacaciones como era el plan.

En fin, ahora estoy aquí, y estuve quejándome por mucho tiempo por cosas como que si me tenía que levantar temprano y estaba de vacaciones, que nos regañaban, que esto, que aquello, bla bla bla. Pero ayer, ayer que hicimos prueba de vestuario, que me maquillaron y que ensayamos, no sé, me dí cuenta de que todo había valido la pena, la sensación de estar en un escenario, con el vestuario y maquillaje de tu personaje, el personaje que interpreté por semanas... fue grandioso, las personas que léan esto y sean artistas me entenderán. El amor al arte viene desde hace un buen tiempo, en realidad no sé por qué, ni como le amé, pero así fue.

Recapitulando me doy cuenta de que tan accidental ha sido mi camino en arte, lo primero que hice fue un musical, "Vaselina", lo sé es ñoño, aún recuerdo el día en el que entré a el proyecto, ese día el profesor encargado de organizarla le dijo a mi grupo de la secundaria que faltaba gente para participar, y pidió que levantara la mano el que estuviera interesado; no sé quien me la levantó, y a partir de ese día el mundo de las coreografías, el vestuario, la escenografía me sedujo de una forma mágica; como me tocaba cantar dos canciones me metí a clases de canto para prepararlas y ahí me dí cuenta de otra de mis pasiones: cantar.

He tenido muy buenos maestros de canto, uno de ellos fue bajista de los Beatles en una gira, una larga semana convivió con esos genios, otro de ellos canta en la Orquesta Sinfónica del Estado de México, él me enseñó a cantar ópera, y otro bueno, el no es famoso jeje, pero fue con el que estuve más tiempo y el que con sus exigencias logré mejorar mucho. Siempre creí que le caía mal, y dejé de ir cuando me vine al DF, pero hace como una semana fui, él no estaba pero hubo una cosa que me impresionó: Todos los nuevos alumnos sabían quien soy, recordé al profesor hablado de sus antiguos alumnos, los que lo enorgullecían y jamás me imaginé ser uno de ellos. También me ha dado dolores de cabeza como una vez que entré a un evento y el organizador/profesor era un envidioso maniaco, que no quería gente que brillara jaja (era como en la película de Bratz, que la chava hace audiciones y rechaza a los talentosos y se queda con los que no representan competencia) ahí conocí a Montse, una niña muy especial en mi vida y que canta hermoso, no creo exagerar cuando digo que Yuridia se queda lela a su lado.

El baile es una cosa aparte, sólo puedo hacer coreografías, el baile libre (jaja eso que) no se me da y no me gusta, o tal vez sea porque no sé, en fin, me he prometido que algún día sabré bailar. Ja! de hecho, una vez fui a un casting y me rechazaron por no saber bailar, aún cuando era el favorito de la fila para entrar porque era el único que cantaba bien jajaja.

La pintura, tomé clases cuando tenía como 10 años, pero mis pinceladas son torpes, lo único bueno que sé es la combinación de colores pero no es suficiente para poder hacer algo bueno. A diferencia de mi mamá o mi tía, que realmente son buenas dibujando y pintando.
La fotografía se me da, creo que es un acto mágico el hecho de que puedas capturar una imagen, más de uno lamentamos el no haber tenido a la mano una cámara en algún momento; díganme entonces si no es mágico el hecho en sí de poder tener en un archivo .jpg o en papel n recuerdo pictográfico? jeje, la fotografía me gusta, más adelante la estudiaré y veremos que se puede sacar de ahí.

La escultura no la he practicado, pero tengo algunas ideas surrealistas, una vez que las haya armado se las presentaré.

La escritura es algo en lo que no tengo mucho, de hecho apenas en enero me aventé a escribir, siempre había tenido ideas pero no me había atrevido a escribir nada y bueno, con lo que empecé me tomaron como verdadero escritor, y yo también me concebi así, digo, ya hasta tengo una novela en proceso y toda la cosa, he mandado colaboraciones aquí y allá y no me ha ido mal.


Ese es mi contacto con el arte, me faltan muchas cosas por hacer, tengo mil planes y proyectos, pero sé que con paciencia y trabajo todo va a salir bien. Mientras tanto seguiremos aquí, recorriendo el camino.






¿Cómo ha sido tu contacto con el arte? Espero tus comentarios y opiniones, abrazos.

jueves, 11 de junio de 2009

El dolor de perder.

Ayer me ocurrió una cosa por demás estremecedora, fui a una oficina de canal 22 en donde estoy haciendo (prematuramente) mi servicio social y al salir me quedé platicando con una amiga en una banqueta, estábamos ahí cuando pasó una señora angustiadísima y llorando, y nos preguntó que si no habíamos visto a un niño como de 9 años con un suéter rojo, le dijimos que no y nos dijo que se había salido del metro General Anaya, decidimos ayudarla a buscarlo y fuimos por toda la calle preguntandole a la gente hasta que llegamos a una caseta y le dijimos al encargado, el habló por la radio y le avisó a todas las demás casetas para que lo buscaran. Nunca sabré si lo encontraron o no, y sinceramente espero que haya sido así porque la señora estaba tan angustiada que me dieron escalofríos; por experiencia propia sé que es una situación horrible, de verdad no hay palabras para describirlo y lo sé porque un día a mi hermana se le ocurrió perderse, el tiempo que tardamos en saber dónde estaba fue el más espantoso de toda mi vida.

Estaba hoy discutiendo hoy con la misma amiga con la que iba ayer y le decía que es horrible pensar el hecho de no volver a ver a una persona que amas, además de que mientras la situación pasa, en tu mente se generan mil y una ideas; ella me decía que cuando un ser querido muere sabes que murió, que físicamente dejó de existir y te resignas, pero lo cabrón de PERDER a alguien es no saber si está vivo o no, si come o no, con que tipo de personas se topó y bueno las mil y un cosas que pasan por nuestras locas cabecitas, y a eso súmale que es un niño y que además es tu hijo pues la neta es para volverse loco.

Personalmente creo que cuando se da la separación de una persona, lo que duele no es el separarse, sino saber que no aprovechaste el tiempo, que pudiste vivir más cosas con esa persona, que desperdiciaste el tiempo en tonterías y dejaste pasar lo realmente valioso, simplemente que pudiste darle más de ti y no lo hiciste por las razones que hayan sido, pero que no lo hiciste. Este tipo de lecciones definitivamente deben hacernos pensar en que hay que aprovechar cada minuto que tengamos a lado de las personas que amamos, detesto decir esto pero no siempre será así y lo mejor es no arrepentirnos o darnos cuenta cuando ya sea tarde.




¿Que opinas del tema? Espero sus experiencias y comentarios.

Saludos y abrazos a todos.